La boda de Jessica y Jordi en el Hivernacle Barceló
Si hay una pareja inquieta y viajera entre los novios con los que me he topado durante todo este tiempo ellos son Jessica y Jordi.
Ella de origen cubano y él español se conocieron saliendo de fiesta por la Ciudad Condal. Al año empezaron a salir para poco después emprender su aventura juntos.
Han vivido en China durante dos años y ahora residen en Cuba aunque de forma temporal puesto que su idea es asentarse en Barcelona en un futuro.
Jordi encontró el momento perfecto para pedirle matrimonio tras las campanadas de Nochevieja en la casa familiar de El Ampurdán. Jessica recuerda que "fue un momento muy emotivo".
Se casaron en el Hivernacle Barceló en Begues, Barcelona y las fotos captadas por el equipo de Liven Photography no pueden ser más espectaculares.
Para los preparativos Jessica llevó una bata de Intimissimi. Confiesa que tuvo un imprevisto con la bata que había encargado y encontrarla el día antes fue toda una salvación para ella.
"Decidí darle un toque moderno y divertido a mi look con los accesorios. Llevé el Aphrodite Halo customizado de Victoria Percival. Tuve una experiencia increíble con ella".
Toda novia quiere lucir radiante en el día, posiblemente, más especial e importante para ella y por eso, Jessica, tuvo claro que no quería llevar un vestido sino dos.
"Mi primer vestido lo firmó Teresa Helbig. Tuve una conexión con ella y su estilo hace años y siempre lo tuve claro. Sabía que con ella nada iba a fallar. El segundo vestido fue de la firma Cortana. Siempre llamó mi atención su estilo etéreo y femenino. Quería algo sencillo y cómodo pero elegante a su vez. Fui a una prueba y encontré el vestido ideal. El modelo Psiquis".
"Lo único que tuve claro en el primer encuentro es que quería un vestido romántico y timeless.
El proceso fue genial, solo tuve 3 pruebas y todo fue increíble. Fue una de las mejores decisiones que tomé".
Las joyas que lució eran todas de Rabat a excepción del anillo de compromiso que era de Verónica Velo, una joyera y amiga cercana de la familia.
Jessica siempre tuvo clara su elección de los zapatos. Es fan de Jimmy Choo y sabía que en su boda no podía lucir otros que no fueran de la firma china.
"Me parecen los diseños más cómodos que puede haber. Elegí el modelo Sacora, un diseño precioso con un toque vintage pero moderno a la vez gracias a las perlas que tanto están de moda".
Su ramo con flores silvestres en tonos rosáceos lo elaboró Flors Barceló que también se encargaron de la decoración de todos los espacios dejándolo todo espectacular.
La ceremonia civil se celebró en el jardín y la pareja decidió contar con un dúo de cello y piano que tocó canciones como 'The Scientist' para la entrada del novio, 'Shallow' para la de la novia y 'All of me' para la salida de los recién casados.
"Uno de los momentos más especiales fue la ceremonia oficiada por el tío de Jordi y en la que también participaron algunos padrinos y madrinas. Fue muy emotiva y amena".
El traje de Jordi es de Tom Ford así como la corbata que lució.
Llevó unos gemelos Cartier que le había regalado su madre y un reloj Rólex que le había regalado su familia política.
Los zapatos eran de Prada.
El cóctel tuvo lugar en los jardines y todos pudieron disfrutar de aperitivos varios de la mano de Jubany.
"Es el catering de Barcelona que más nos gusta y acertamos por completo".
"Es el catering de Barcelona que más nos gusta y acertamos por completo".
"Durante el aperitivo contamos con Domingo y Roy, concursantes de La Voz. ¡Unos chicos con mucho talento!"
La inspiración para la decoración, Jessica se la transmitió tanto a los decoradores como a los floristas que dejaron el invernadero espectacular.
"Tengo un estilo muy marcado y siempre tuve muy claro lo que quería en mi boda. Lo dejamos en manos de Nuovi Piatti".
"Fue una noche mágica. El cielo del invernadero era estrellado. Es como si de él se desprendiesen gotas de luz, amor, felicidad y emoción".
Entraron al ritmo de 'Have you ever seen the rain' de Rod Stewart y asegura Jessica que será una canción que asociarán a ese momento de por vida.
Eligieron mesas rectangulares que fueron colocadas en dos lados así que cuando entraron pudieron recorrer el pasillo principal.
"Mientras avanzábamos, se iba encendiendo una banda de fuegos fríos en un lateral del espacio. Aprovechamos ese momento para bailar juntos y no hacer baile posteriormente. Los invitados se animaron a cantar mientras bailábamos; fue un momento mágico que nunca olvidaré".
A los invitados les regalaron abanicos de hoja de palma natural que habían sido hechos a mano en México con el logo de la boda para usarlo durante la ceremonia y posteriormente les obsequiaron velas aromáticas y puros cubanos.
Los chicos de Third Floor fueron los encargados de ponerle ritmo a la fiesta y después Bernat, Dj de BeTuned se encargó de poner el broche de oro a una discoteca que fue montaba por Soundworks.
"Son un grupo madrileño y no pudimos elegir mejor. Tienen mucho rollo y son unos músicos excelentes".
"Fue divertidísimo. Bernat puso pistolas de humo, tubos fluorescentes y confeti entre otros gadgets. Todo lo necesario para animar una fiesta increíble".
Jubany también montó un candy bar que hizo las delicias de todos los invitados. Y además, contaron con un neon con el hashtag de la pareja de fondo: #JessFortEver.
Daniel Bencomo&Mr High se encargó de captar todos los momentazos en vídeo. La pareja considera que tiene un estilo único dentro de la industria.
"Si tuviera que ponerle un título a nuestra boda sería "Shining down like water". Es una frase de la canción que escogimos para la entrada. A nosotros nos da mucha energía. Fue una noche mágica, romántica y divertida".
¡Gracias Jessica y Jordi por compartir vuestra boda!
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